En el sofá haciéndonos arrumacos después de desayunar
- Tengo que preguntarte algo
Cutie se tensa porque no le gustan mis preguntas a bocajarro
- ¿Qué te pasa a ti con el sexo oral?
Cutie se tensa aún más porque esto es peor de lo que
pensaba. Con lo a gustito que estaba él sin intimar.
- Nada
- Entonces ¿por qué no lo haces?
- Sí lo hago… a veces… Cuando surge…
- (a mí ya me ha “surgido” pero parece que no te
has dado cuenta) …Pero no te gusta
- … No… No mucho
- ¿Te da asco? ¿Te aburre?
- No, no me da asco. Es que no me gusta. Como que
si haces eso no haces nada más
- (claro, esa es la idea) Ah. Está bien. Sólo
tenía curiosidad. No estoy acostumbrada.
- Pues yo lo he hablado alguna vez con mis amigos
y todos piensan igual.
- Qué curioso. A mí no me había pasado nunca.
Todos los chicos con los que he estado se han arrancado sin pedírselo
- Pues ya lo has jodido porque si no me dices
nada, un día cualquiera, así, en el momento, me apetece y lo hago, pero ahora
ya…
Claro. Ahora he interferido en la alineación de los astros
que te empujan hacia mi vórtice favorito. Habrá que esperar al próximo eclipse
de luna. Qué mala suerte. Seré bocazas…
No hay comentarios:
Publicar un comentario